El Centro Nacional del Hidrógeno estará operativo en Puertollano dentro de 19 meses
Última modificación 26 marzo, 2019
Hoy se firmó el contrato para la ejecución de obras con la UTE ISOLUX-CORSÁN
La sede del Centro Nacional de Experimentación de Tecnologías del Hidrógeno y Pilas de Combustible (CNH2) costará casi 26 millones de euros (más de 4.300 millones de las antiguas pesetas). Isolux Corsán ha resultado la adjudicataria del contrato, que prevé la construcción del edificio y la compra del equipamiento mínimo para su puesta en marcha. Los trabajos deberán terminar antes de 2012, año en que está prevista su puesta en marcha.
Diecinueve meses. Es el tiempo estimado para que se ponga en marcha el Centro Nacional del Hidrógeno y Pilas de Combustible (CNH2), que se ubicará en el polígono La Nava III de Puertollano. Se trata de una de las 24 Instalaciones Científico-Técnicas Singulares que el Ministerio de Innovación materializará en España con las que se persiguen varios objetivos: el principal, invertir en I+D para cambiar el actual modelo productivo y como añadidura dar pasos de gigante para que el país avance en su independencia energética.
En el caso del CNH2, las expectativas son enormes por cuanto se trata de un proyecto para desarrollar una tecnología incipiente, aún en fase experimental, como es el hidrógeno; un vector energético de futuro, dicen los expertos, un auténtico filón por cuanto complementará a la electricidad permitiendo almacenar la producida a través de fuentes renovables con la consiguiente ventaja que ello supone. En definitiva, la creación de una tecnología específica para la producción de hidrógeno, una verdadera estrategia energética nacional para en palabras de Enrique Díez Barra, Viceconsejero de Ciencia y Tecnología en Castilla-La Mancha y presidente del Consejo Rector del CNH2, sumarse a esos mecanismos «que garantizarán la presencia española en el mundo». Es tal la dependencia energética de España que el viraje pasa por acometer proyectos salomónicos como el del CNH2 e ir posibilitando una mayor autonomía.
Ejecución de obras en un plazo de 19 meses
Díez-Barra fue el encargado de firmar el contrato de adjudicación de las obras que finalmente ha recaído en la UTE ISOLUX-CORSÁN CORVIÁM CONSTRUCCIÓN, por ser la propuesta que mayor puntuación técnica y económica ha obtenido en las sesudas fases de evaluación. Además, se adjudica por un importe cercano a los 26 millones de € y durante la construcción del edificio se contratará en torno a 150-200 personas lo que redundará en la generación de actividad económica en Puertollano.
Para hacerse una idea de la complejidad implícita en este proyecto, el Consejo Rector del CNH2 tuvo que designar a un Comité de Expertos con el fin de evaluar las propuestas técnicas planteadas. Desde la entidad se asegura que el sistema de evaluación seguido por dicho comité «ha sido exhaustivo y ha permitido eliminar cualquier subjetividad del proceso de evaluación y facilitar la selección final del adjudicatario del concurso».
Características del edificio
Al tratarse de una Instalación Científico Técnica Singular (ICTS) los inicios de las obras no serán inmediatos. Durante cinco meses, ISOLUX-CORSÁN llevará a cabo trabajos de ingeniería de detalle y después se dispondrán de 14 meses para la ejecución de la obra, adquisición del equipamiento y puesta en marcha de la instalación. Obras que estarán estructuradas en tres fases: creación de oficinas y despachos, materialización de cinco unidades tecnológicas que estarán compuestas de laboratorios y talleres, y por último ejecución de la propia instalación.
Advierte Manuel Montes, Director del CNH2, del carácter experimental de una sede que según él «será la carga energética de la propia instalación». La idea es producir hidrógeno, almacenarlo en pilas de combustible y su utilización para la transformación de energía. Montes incide en que con estos requisitos, el edificio deberá tener una elevada eficiencia energética así como un bajo consumo eléctrico y térmico. El Director del CNH2 habla del empleo de energía geotérmica para lograr mayor eficiencia así como de microrredes eléctricas, sistema que será novedoso a escala mundial.
Todo ello para lograr una infraestructura única en su género, que aglutinará a investigadores y científicos de alta cualificación tanto del ámbito nacional como internacional para desarrollar y potenciar actividades de investigación que se traduzcan en colaboraciones para dinamizar el mercado energético nacional. Por este motivo, se contempla la incorporación al CNH2 de una caterva de 170 investigadores (en la actualidad ya se cuenta con 53). Una plétora de «lumbreras» a los que se les delega el reto de consolidar una fuente energética que a juicio de Montes «será portador energético para sectores como la movilidad y el transporte». Perjura el Director del CNH2 que esta tecnología no será rival de la electricidad sino su complemento idóneo ya que acabará con el principal hándicap su almacenamiento seguro.
El CNH2 será catalizador y catapulta de proyectos empresariales que en el edificio podrán verificarse y homologarse. Cuestión relevante para comercializar productos basados en el hidrógeno, generar una economía basada en este sector. Montes expresa su deseo de «terminar pronto para ser útiles al país».
Apuesta de la JCCM por el I+D
Utilidad que compartía Enrique Díez-Barra quien evocó los pasos dados, a nivel institucional, para que el CNH2 recalara en Puertollano. Dejó claro la apuesta del gobierno regional por el I+D, «en los últimos cinco años se ha triplicado la inversión» añadía el Viceconsejero de Ciencia y Tecnología para quien la ubicación de este centro en Puertollano era de cajón «por estar a la vanguardia del desarrollo tecnológico». De paso, Díez-Barra alabó la importancia de invertir en I+D, germen de un crecimiento sostenible basado en el conocimiento e innovación, dos términos que emplea a menudo el gobierno regional por cuanto posee una vertiente integradora «ayudar al desarrollo social».
No extraña que esta tentativa sea percibida con agrado por Joaquín Hermoso, alcalde puertollanense, para quien está fuera de dudas que los gobiernos central y regional (ambos financian la construcción del CNH2) «demuestran su compromiso científico-tecnológico con la ciudad».
A la vanguardia de la investigación científico-tecnológica
Desde hace tiempo, el primer edil señala esta cualidad inherente en Puertollano; junto al CNH2 ya está funcionando el ISFOC y recientemente Elcogas acaba de abrir una planta de captura de CO2 y producción de hidrógeno, ejemplos para situar a Puertollano «como un baluarte en la investigación científica-tecnológica con energías renovables».
Vanguardia pura y dura que es perfectamente compatible con actividades como la minería. Hermoso Murillo quiso hacer referencia a la delicada situación que atraviesa el sector y sin tapujos asegura que el carbón en España «tiene futuro y quien no lo vea se equivoca». Bajo su prisma, este combustible contribuye a la sostenibilidad y puso como exponente la central GICC de Elcogas.